A la hora de viajar o en nuestro propio hogar, suele ocurrir que se experimentan
problemas con la cobertura del teléfono móvil,
especialmente en algunas zonas, sobre todo rurales o en interiores de
edificios. Además, en algunos casos, en especial en núcleos turísticos,
puede darse una situación de saturación de las comunicaciones debido a
la cantidad de personas que hay conectadas a la vez a una misma antena.
Femtoceldas
Son unas
miniantenas en forma de panel que, al colocarse en el interior de un hogar o un edificio, mejoran la cobertura móvil.
Las femtoceldas funcionan del mismo modo que un
repetidor
o una antena de telefonía móvil, al hacer que los teléfonos móviles se
conecten a ellas de la misma forma y reboten la señal. Las
comunicaciones se realizarían a través de la femtocelda y no desde la
antena de telefonía móvil que estuviera en cobertura en la zona del
usuario. No obstante, las femtoceldas necesitan disponer de acceso a
Internet para ser eficaces, por lo que deben conectarse a un router ADSL
o a un acceso por cable para que todas las comunicaciones se emitan a
través de este tipo de conexión.
Una ventaja adicional, además de la cobertura, es que los teléfonos móviles
mejoran el rendimiento de su batería
con las femtoceldas, ya que cuanto mejor es la cobertura, menos se
consume. Por otro lado, el precio de las llamadas puede ser inferior,
aunque depende de las ofertas comerciales del operador que hayamos
contratado. Por el contrario, las femtoceldas tienen aspectos negativos;
uno de ellos es que su rango de cobertura es
limitado,
es decir, está orientado para mejorar la cobertura solo en zonas
concretas y no es un aparato que se pueda llevar encima, por lo que solo
son útiles en zonas que ocupemos de forma habitual.
Además, no se pueden comprar por libre. Es necesario adquirir la femtocelda junto con el
operador
de telecomunicaciones contratado, ya que el teléfono móvil debe ser
capaz de conectarse a sus redes y su uso está regulado mediante una
tarifa mensual. Según la legislación vigente, solo los operadores pueden
emitir en las frecuencias autorizadas para los servicios de telefonía
móvil. En España, operadores como Movistar y Vodafone ha ofrecido en el
pasado el servicio de femtoceldas a sus clientes por un coste de entre
nueve y quince euros al mes, al que se sumaba el coste del aparato, que
ronda los 300 euros. En la actualidad ningún operador ofrece el
servicio, pero está opción podría regresar de la mano de Orange.
En Estados Unidos, sin embargo, este tipo de dispositivos son de uso
bastante habitual debido a la orografía del país, las grandes distancias
entre ciudades y la mala cobertura en zonas densamente pobladas.
Incluso hay algunos comercios online, como
Repeater Store,
especializados en la venta de aparatos amplificadores de señal y
antenas para mejorar la cobertura tanto en edificios y casas como en
movilidad.
'Signal boosters'
Otro tipo de dispositivos para mejorar la calidad de la señal de telefonía móvil son los llamados 'Signal boosters' o
amplificadores de señal. Estos aparatos, con un coste
entre 250 y 1.000 dólares,
mejoran mediante una antena externa y un amplificador la recepción de
la señal de telefonía móvil. Es recomendable instalarlos fuera de la
vivienda o del habitáculo donde queramos tener mejor cobertura, ya que
funcionan por el aire, al igual que una antena de televisión o una
radio. Como inconveniente, pueden provocar interferencias con otras
señales de telefonía móvil, al operar en frecuencias cercanas, y
registrarse oscilaciones en la señal, lo que incide de forma directa en
la calidad de la cobertura. Por este motivo, en Estados Unidos, las
autoridades trabajan en una nueva regulación para ellos que permita
limitar su potencia, frecuencia de uso y los canales de distribución y
venta, de tal modo que su comercialización y uso no interfiera en la
señal de otros operadores.